El Puerto de Lisboa (Portugal) ha instalado la primera turbina eólica urbana, convirtiéndose en el primer puerto del país en contar con un equipo de este tipo. Desarrollado en colaboración con la startup Windcredible, el proyecto responde a los objetivos medioambientales del puerto. Instalado en la Torre VTS del puerto, el aerogenerador de una potencia de 1 kW puede cubrir entre el 30 y el 60 por ciento de las necesidades energéticas de una vivienda de tamaño medio. El proyecto piloto busca evaluar la viabilidad de las turbinas eólicas en zonas urbanas, con vistas a su futura producción y comercialización, al tiempo que pretende impulsar la sostenibilidad urbana y los beneficios para la comunidad. El proyecto demuestra la capacidad de las ciudades portuarias y de sus actores para innovar y acelerar la transición energética en estos territorios, dos temas clave que se debatirán en la próxima Conferencia Mundial Ciudades y Puertos que se celebrará en Lisboa del 27 al 29 de noviembre.

En el contexto de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) que se celebró en Bakú (Azerbaiyán) del 11 al 22 de noviembre, la iniciativa Resilience4Ports ha lanzado un llamamiento a la acción para acelerar la resiliencia climática de los puertos. La declaración es el primer compromiso sectorial, basado en la acción, de los actores portuarios mundiales con la resiliencia de sus infraestructuras, operaciones y actividades. Los socios de la industria están invitados a: comprender y gestionar los riesgos climáticos; integrar la resiliencia climática en los modelos y procesos empresariales; fomentar una comunidad centrada en la continuidad de las actividades; y compartir conocimientos y experiencias. La AIVP y dos de sus miembros, los puertos de Bakú y Bilbao (España), participan en cuya iniciativa. La iniciativa Resilience4Ports ha incluido el proyecto BilbOPS de la Autoridad Portuaria de Bilbao como ejemplo en su informe de situación, destacando su trabajo para aumentar la resiliencia de los ecosistemas naturales y la generación de energía.

El puerto de Bruselas (Bélgica) pone actualmente a disposición de las empresas una nueva amplia gama de locales, idealmente situados a orillas del canal y cerca del centro de la ciudad. Estos espacios, que pueden utilizarse como oficinas o zonas de almacenamiento, varían en tamaño desde menos de 100 metros cuadrados hasta más de 10 mil metros cuadrados, por lo que pueden satisfacer las necesidades específicas de los profesionales. Las instalaciones están estratégicamente situadas para facilitar las conexiones logísticas y comerciales, creando un entorno dinámico. El puerto se convierte así en un verdadero hub económico, con infraestructuras modernas adaptadas a los desafíos actuales de las empresas.

Haropa Port (Francia) ha seleccionado 3 proyectos industriales para ocupar un emplazamiento “llave en mano” de 60 hectáreas denominado “Ouest 29-Le Havre”. Las empresas ganadoras son internacionales: Livista Energy (Luxemburgo), Air Products (EE.UU) y Q-Air (Francia). Invertirán cerca de 2.600 millones de euros en proyectos de transición energética. Tras el año 2029, el terreno acogerá industrias dedicadas a la producción de hidrógeno, metanol renovable y litio. Este proceso de reindustrialización forma parte de la estrategia Francia 2030, destinada a transformar las zonas portuarias en centros industriales sostenibles. A futuro se prevé la creación de más de 720 de empleos locales.

Al igual que muchos puertos estadounidenses, el puerto de San Francisco (EE.UU.) se va a beneficiar del multimillonario programa de inversión “Puerto Limpio” de la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA). El puerto recibirá 55 millones de dólares para impulsar sus esfuerzos de electrificación. Los fundos se utilizarán para construir un transbordador eléctrico con capacidad para 400 pasajeros y una nueva terminal, así como para mejorar la infraestructura eléctrica. La nueva terminal contribuirá a conectar un nuevo sector de la bahía con la red de transporte, al tiempo que proporcionará a los residentes nuevos accesos al frente costero. También se planea adquirir tres embarcaciones eléctricas adicionales con capacidad para 150 pasajeros.