Desafío(s)
¿Cómo puede el Puerto destacar sus infraestructuras con intervenciones artísticas para mejorar su integración y visibilidad?
Buena práctica
Valorizar y poner en escena las instalaciones y los espacios
Las luces, los colores y los materiales son otros tantos elementos en que es posible basarse para la composición arquitectónica de los espacios públicos, los edificios y los equipos portuarios existentes o nuevos, con el objeto de rescatar a las ciudades portuarias de una imagen industrial muchas veces negativa. Mediante el uso creativo de estos elementos, como en la Dársena F de Buenos Aires, donde los antiguos silos areneros se han rehabilitados con intervenciones artísticas para dar una nueva imagen al puerto, los ciudadanos pueden disfrutar de su patrimonio portuario a través de una nueva lectura de los espacios.
Esta buena práctica también cumple el objetivo 6.2 (Integrar en las instalaciones portuarias espacios y funciones abiertos a los habitantes y a los visitantes, que les muestren el puerto y sus actividades) de la Agenda 2030 de la AIVP.
Estudio de caso
En 2017, las autoridades del puerto, en colaboración con las autoridades municipalidades, se embarcaron en un proyecto de transformación de una zona bastante abandonada en torno en la Dársena F. Se decidió que el sitio, que cuenta con 10 silos areneros que cumplen un rol de centro de distribución de 50% de la arena utilizada en la construcción de la ciudad, se convirtiera en un lugar de paseo.
La intervención pretendía mantener la función de “puerto arenero” al tiempo que se mejoraba su estética para hacer la zona más atractiva. Un importante beneficio ambiental de este proyecto de remodelación fue la reducción del tráfico rodado al transportar la arena en barcos en lugar de camiones, cada embarcación cargando lo mismo que diez camiones.
Además de la retirada de los buques abandonados y de la realización de obras viales, con la creación, en particular, de recorridos peatonales, el Puerto recurrió a artistas urbanos para dar visibilidad a las antiguas infraestructuras portuarias, convirtiendo silos gris oscura y pardusca en estructuras luciendo murales multicolores. Para realizar estos grandes murales, los artistas tuvieron la posibilidad de elegir entre tres temas:
· la fauna y la flora autóctona;
· los vivos colores de las regiones argentinas (Patagonia, Pampa, Norte, Mesopotamia);
· y el patrimonio de la dársena F con sus barcos hundidos y sus antiguos hidroaviones que de allí partían hasta comienzos de los años 60.
Los coloridos murales realizados por ocho artistas se encuentran ya concluidos, y es posible pasearse en medio a la flora argentina, llamas, colibrís, cóndores o aras, y jaguares. Aún falta instalar los espacios verdes e completar la iluminación. Los costes relativos a la pintura fueron pagados por los dueños de los silos, y los de las veredas y senderos, por el Puerto.
Esta iniciativa revitalizo una zona antes descuidada y degradada para transformarla en un espacio atractivo para disfrute del público. Ilustra el poder del arte y la renovación urbana, que aporta vitalidad y cultura a un rincón de la ciudad antes olvidado.
Informaciones
Murales porteños. La fauna autóctona cobra vida en los silos (Spanish) (translation: Buenos Aires murals. Native fauna comes to life in the silos)
El nuevo Puerto de Buenos Aires: la historia de un emblema de la ciudad que pasó del gris al color y los murals (Spanish) (translation: The new Port of Buenos Aires: the history of an emblem of the city that went from gray to color and murals)