Desafío(s)

Buena práctica

Financiar los proyectos de desarrollo mediante el modelo de financiación cruzada entre puerto y ciudad

La magnitud de la financiación a la que se debe recurrir para operaciones de largo aliento, al igual que la necesidad de convencer y atraer a los inversionistas privados, deben incitar a la innovación en la elaboración de los modelos de financiación. Su implementación podrá basarse en la creación de estructuras específicas aptas para iniciar y financiar los primeros desarrollos y crear el efecto impulsor necesario. La ciudad de Bilbao cuenta con dos proyectos que unen a actores públicos y privados por el desarrollo y la remodelación de áreas urbanas.

Esta buena práctica también cumple el objetivo 4.4 (Desarrollar procesos colaborativos, apoyándose en el conocimiento científico y el saber de la sociedad civil, para la toma de decisiones) de la Agenda 2030 de la AIVP.

Estudio de caso

Creada en noviembre de 1992, “Bilbao Ria 2000” tenía la misión de recuperar zonas degradadas o sectores industriales y portuarios en decadencia en la ciudad de Bilbao, entre los que se encontraba el sector de Abandoibarra, que luego sería emblemático, en que está instalado el Museo Guggenheim. La organización reúne a los principales actores públicos involucrados. Provista de un capital completamente público, está constituida como Sociedad Anónima, estatus elegido para conferirle flexibilidad y reactividad. Su misión es doble: planificación de instalaciones y puesta en práctica de operaciones.

Desde 1993, las repercusiones de la política aplicada por Bilbao Ría 2000 han ido in crescendo. Partiendo de pocos recursos financieros, Bilbao Ría 2000 tuvo inicialmente una excelente acogida por parte de los inversionistas privados. Obtuvo del Puerto y de la Sociedad Ferroviaria la cesión de algunos terrenos en contraparte a la realización de nuevas infraestructuras: el puerto exterior, y una nueva línea ferroviaria al sur de la conurbación. La adquisición de los terrenos liberados le permitió llevar a cabo una primera operación: la reventa de los suelos para la implantación de residencias en el sector de Ametzola. Para Bilbao Ría 2000, esta operación le reportó los primeros ingresos que serían reinvertidos de inmediato en las operaciones siguientes, en particular, en el barrio de Abandoibarra. Posteriormente, la evolución del mercado inmobiliario, asociada al efecto Guggenheim y la provisión de financiación institucional y cofinanciaciones europeas para algunos trabajos grandes, contribuyeron a asentar su credibilidad, mientras que el efecto palanca atrajo a inversores privados.

Hubo una segunda entidad, “Bilbao Metropoli 30, que desempeñó un papel notable a la hora de atraer inversionistas a la ciudad. Creado en mayo de 1991 por el Gobierno, reúne a la Cuidad de Bilbao, las municipalidades del Área Metropolitana, el Gobierno vasco, el Puerto, la Cámara de Comercio, dos universidades y a una centena de participantes privados. Verdadero actor de marketing urbano, no dejó de jugar desde entonces la carta de la valorización internacional de Bilbao. La organización busca desarrollar proyectos metropolitanos y asociaciones público-privadas, además de fomentar la participación de la sociedad civil. Asimismo, el grupo promueve alianzas globales mediante la organización de reuniones y seminarios. A modo de ejemplo, en 2024, el grupo está organizando los Seminarios Internacionales Metrópolis de Futuro, donde se abordarán manifiestos de ecología, economía, sociedad y urbanismo estratégico con representantes de las redes internacionales Eurocities, METREX, el Parlamento Global de Alcaldes e Impact the Future.

Información adicional :

https://www.bilbaoria2000.org/en/

https://www.bilbaoria2000.org/en/bilbao-ria-2000/what-is-bilbao-ria-2000/

https://www.bilbaoria2000.org/en/actions/ametzola/

https://www.bm30.eus/en/

https://www.bm30.eus/en/goals-and-objectives/purposes/

En imágenes